Noticia26/11/2021

Cáritas Diocesana de Mérida-Badajoz reabre el proyecto «Ola de frío» en Mérida

Este dispositivo de emergencia cuenta con habitaciones individuales y con capacidad para 20 personas

El próximo día 1 de diciembre, desde Cáritas Diocesana de Mérida-Badajoz se pondrá en marcha el proyecto «Ola de frío» en la ciudad de Mérida, gracias a la financiación de la Junta de Extremadura y del Ayuntamiento de la capital extremeña.

Este recurso, ubicado durante este año en la calle Suárez Somonte, estará abierto hasta el 30 de abril de 2022 y se dispondrá de un espacio para atender a 20 personas, desde las 17:00h hasta las 09:00h de la mañana siguiente, contando con servicios ropero, de ducha caliente, cena y desayuno, además de servicio de lavandería.

“La finalidad es ofrecer un espacio que dignifique la situación de las personas que viven en la calle, –indica Ana Belén García Rubio, coordinadora del área de Inclusión Social de Cáritas Diocesana—, garantizando una atención básica y que evite un mayor deterior de su situación personal. Es una oportunidad para romper el aislamiento de las personas sin hogar, en ocasiones inaccesibles y poder trabajar con ellas la motivación al cambio.”

Proyecto «Ola de frío» en Mérida

El año pasado, por primera vez en la ciudad de Mérida, Cáritas Diocesana de Mérida Badajoz, contando con la financiación del Gobierno regional y la colaboración del Ayuntamiento de la ciudad, pudo abrir las puertas de un recurso que mitigase, durante los meses más fríos del año, la situación de extrema vulnerabilidad de las personas que viven en la calle.

Durante los 5 meses que permaneció abierto el recurso durante el curso pasado, se atendió a un total de 75 personas, de las cuales 24 de ellas fueron derivadas a otros centros más específicos para ayudarles a salir de su situación de exclusión. El índice de ocupación del recurso fue del 98%.

Coordinación con la Cáritas Arciprestal de Mérida

Este dispositivo de emergencia se pone en marcha tras la preocupación de la Cáritas Arciprestal de Mérida por la situación de extrema vulnerabilidad de las personas en situación de calle de la ciudad emeritense. Gracias a sus esfuerzos y su coordinación con Cáritas Diocesana de Mérida-Badajoz y las Administraciones Públicas se pudo llevar a término dicho proyecto.

Por otra parte, este recurso sería inviable llevarlo a cabo si no fuera por el trabajo y la dedicación que las personas voluntarias de Cáritas Arciprestal de Mérida dedican, día a día, por las personas más vulnerables y excluidas de la comunidad.

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